Limitar el uso de redes sociales puede traer beneficios significativos para la salud mental. Estudios demuestran que al reducir o dejar las redes sociales, las personas pueden experimentar mejoras rápidas en sus niveles de soledad y depresión. La ironía es que, aunque las redes sociales se presentan como un medio para conectar, muchas veces contribuyen a la sensación de aislamiento. Aunque no siempre es fácil hacer este cambio, entender los efectos negativos, como problemas de sueño y la activación de los mecanismos de recompensa en el cerebro, puede ser un buen incentivo para intentar limitar su uso.
Para empezar, se recomienda lo siguiente:
- Hacer una prueba temporal: Se puede intentar dejar las redes sociales durante dos semanas. Durante este tiempo, observe cómo se siente. Cambie la contraseña por una difícil para evitar iniciar sesión fácilmente.
- Identificar las plataformas que realmente aportan: Mantenga solo aquellas que le generan bienestar y deje o limite las que no.
- Encuentre otras actividades: Sustituya el tiempo en redes por acciones que le hagan sentir mejor, como enviar mensajes a sus seres queridos, leer o ser más productivo en las tareas laborales.
Las redes sociales también pueden tener beneficios, como ser una fuente de apoyo para grupos específicos, pero es importante evaluar el impacto que tienen en su vida. Si siente que le afectan más de lo que le benefician, tomar un descanso puede ser un buen paso para mejorar su bienestar general. Leer más.
Salud
¿Llegamos al máximo de expectativa de vida?
Un estudio publicado en Nature Aging sugiere que, a pesar de los avances médicos y tecnológicos, es poco probable que la expectativa de vida humana promedio supere significativamente los 90 años en un futuro cercano. Aunque la esperanza de vida ha aumentado en varios países como Australia, Francia y Japón entre 1990 y 2019, el ritmo de crecimiento ha disminuido, excepto en Hong Kong. Según el investigador S. Jay Olshansky, la vida promedio podría estabilizarse alrededor de los 87 años, y aunque algunos científicos creen que las mejoras en tratamientos podrían extender más la vida, este estudio cuestiona esa posibilidad.
Olshansky destaca que, incluso si se redujeran las muertes tempranas y se lograran avances en medicina preventiva, la expectativa de vida no aumentaría drásticamente, ya que el envejecimiento natural de los órganos y sistemas corporales sigue siendo un límite importante. Otros expertos coinciden en que, sin una intervención que ralentice el proceso de envejecimiento en sí, es improbable que se logren aumentos significativos en la longevidad. Sin embargo, algunos científicos mantienen la esperanza de que futuros descubrimientos en medicina anti-envejecimiento puedan cambiar este panorama.
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En nuestro podcast
La sobrecarga laboral, el mal manejo de tareas cotidianas, los problemas en nuestras relaciones y mucho más contribuyen a que nuestro cerebro se mantenga en permanente estado de alerta. Esto se vincula, inevitablemente, al estrés crónico. En este episodio conversamos con la psicóloga Mariella Alpízar para entender sobre los efectos cerebrales de ese estado y, a la vez, sobre cómo “bajar las revoluciones” para reducir la tensión y evitar problemas cerebrales a mediano plazo. Escuchar acá: