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El cannabis en Latinoamérica

Por Natalia Solano
@heyynati
@theupcollectiveco

Reiteramos el valor de la unión para lograr consolidar proyectos que nos benefician a todxs.

 

Durante el 2018 y 2019 tuvimos el privilegio de vivir un acercamiento cercano con la industria norteamericana del cáñamo. Entendimos que su modelo fácilmente se podría replicar en el país, trayendo consigo nuevas oportunidades de empleo, crecimiento para la región y sobre todo bienestar. 

La clave está en la colaboración, y como país tenemos mucho que aportar: nuestra ubicación geográfica, que nos brinda diversidad de climas y condiciones incomparables de nuestros suelos, podrá ofrecer productos de muy alta calidad, garantizando así variedad y altos estándares representantes del bloque.

“Será vital unir gremios internos, pero lo más importante que tenemos que recordar es disfrutar de esta industria y sobre todo hacer bien las cosas”, dijo el Director Ejecutivo de La Cámara Colombiana de Cannabis Medicinal e Industrial durante el pasado Congreso Internacional de Cannabis Legal “Cannabis Mexico Summit”, celebrado del 25 al 28 de marzo.

Actualmente se percibe un interés creciente por ser parte de la ola comercial que vemos venir desde lo más arriba del continente. A la vez, es sumamente importante resaltar los temas ambientales que estamos abarcando al promocionar este cultivo. Esto, tomando en cuenta que es fuente de energía literalmente verde; pero también es obligatorio asegurar el cumplimiento de la integración de organizaciones indígenas a la eventual producción de cannabis medicinal.

Necesitaremos organizaciones múltiples que velen por el cumplimiento de las normas, y que estas no lleguen a atropellar el derecho fundamental a la salud. Sobre dicha línea nos dejamos imaginar centros de medicina cannabinoide, donde los pacientes puedan ser atendidos por especialistas, así como lo ha promovido la red de mujeres pro cannabis en Puerto Rico, quienes ya tienen el proyecto en marcha.

Los países grandes como Colombia, México y Brasil se están alineando y le apuntan a la exportación entre sus pares, ya que tienen la capacidad de abastecer esos mercados masivos en menor tiempo. Costa Rica tiene todo el campo para jugar su mejor carta, con prácticas ecológicas, tecnología y experiencias enriquecedoras; es ahora el momento para abrirnos la puerta a un mejor futuro. 

En conferencias recientes muchos coinciden en que la regulación no debería sobrepasar las normas que se le establecen por ejemplo a la industria del alcohol y el tabaco, refiriéndose a las precauciones con respecto a los mensajes publicitarios y restricciones de comercialización.

La tecnología actual permite ahorrar miles de dólares en instalaciones de laboratorios y procesos que suelen ser muy técnicos y avanzados. Por ejemplo, gracias a estas herramientas prácticas y eficientes recomendadas por los mismos cultivadores en Estados Unidos y Canadá, existe la capacidad de medir la humedad de las flores y conocer los porcentajes de dos de los cannabinoides más importantes en tan solo 5 minutos. Esto facilita el control para una trazabilidad robusta y una cosecha de alta calidad, bajo los más altos estándares de precisión. También contamos con el apoyo internacional para integrar una tecnología que rastrea con detalle todo el camino de la semilla para garantizar la entrega de productos seguros a los consumidores.

Confiamos en poder acercar pronto estas soluciones a los laboratorios de la Universidad de Costa Rica, que ya cuentan con investigaciones en el tema, específicamente a la escuela de Farmacia con la que hemos participado en simposios de cannabis medicinal.

Para el resto de Centroamérica el camino está minado por el tema de los carteles y la guerra contra las drogas, pero conocemos de organizaciones internacionales que tienen interés en extendernos la mano para evitar más casos de criminalización alrededor de la planta de Cannabis. 

Reiteramos el valor de la unión para lograr consolidar proyectos que nos benefician a todxs y es un gran momento para aglomerar estas fuerzas hacia un mismo objetivo.

 


 

Co-fundadora y directora de operaciones de T H E  U P º C O L L E C T I V E, enfocada en la neuropsicología y la tecnología. Amante de los videojuegos.