Por Mónica Angel
@monica.m.angel
Hola, mi nombre es Mónica. Amo ver series y tengo trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Como se podrán imaginar, tengo problemas de concentración y memoria, pero aún así me encanta ver series que requieren de toda mi atención e interés para entenderlas. Les voy a recomendar dos de estas series que valen tanto la pena que no importa devolverlas mil veces y tener crisis de identidad después de cada capítulo.
La primera serie de esta corta lista es Dark (2017), una producción alemana de ciencia ficción donde nada tiene sentido al inicio, pero todo tiene una explicación al final. Esta serie toma lugar en la ficticia ciudad de Winden, donde empiezan a desaparecer varios niños sin dejar rastro. Hasta aquí no hay dolor de cabeza ni necesidad de tomar apuntes, pero todo cambia cuando Mikkel, un niño de 11 años, se pierde de noche en una cueva y aparece 33 años en el pasado. La búsqueda de Mikkel por parte de su familiares y amigos involucra viajes en el tiempo y secretos familiares que unirán a los habitantes de Winden de maneras escalofriantes e inexplicables.
Al ser una serie en alemán solo hay dos opciones: aprender a hablar el idioma (si ya lo manejan, felicidades, yo de hallo no pasé) o leer subtítulos. En teoría hay una tercera opción: verla doblada al español, pero la mayoría de los diálogos, y sobre todo la emoción, se pierde en la traducción. Como mencionaba antes, ver esta serie de principio a fin es un desafío (me tomó tres intentos pasar del primer capítulo), pero cada plot twist hace que cada minuto de confusión valga la pena. Las tres temporadas de Dark están disponibles en Netflix.
La segunda serie que me dejó contemplando el significado de la vida, y olvidando que tenía que entregar un trabajo antes de medianoche, se llama Severance (2022). Esta serie estadounidense nos cuenta la historia de un grupo de trabajadores de la ficticia empresa Lumon Industries, que deciden someterse a una cirugía para dividir su conciencia en dos. Esto tiene como efecto que fuera de la empresa parecen ser personas comunes y corrientes, pero al entrar al edificio de Lumon, se olvidan por completo de sus vidas no-laborales.
Podría sonar ideal de primera entrada: olvidarse de los problemas del trabajo al terminar la jornada laboral. El verdadero problema inicia cuando las versiones de trabajo de cada personaje empiezan a cuestionarse poco a poco su realidad. A pesar de que esta serie es más fácil de seguir que Dark, la atención a los detalles debe ser máxima para entender mejor la historia de cada personaje y disfrutar de la trama en general. Por el momento Severance solo cuenta con una temporada disponible en Apple TV, pero a finales de este año se estrenará la segunda.
Si llegaron hasta aquí sin distraerse, felicidades, ya están listxs para ver estas series.